Al conmemorar 30 años de la Plataforma de Acción de Beijing, un grupo de organizaciones de mujeres, académicas y feministas de Medellín convocamos una serie de tres webinars preparatorios y un acto de reconocimiento a colombianas de Medellín que participaron en la Conferencia Mundial de la Mujer de Beijing del 4 al 15 de septiembre de 1995, y que hicieron un aporte para avanzar en derechos.
Este espacio de diálogo intergeneracional, realizamos un balance de los avances y los desafíos que persisten para lograr el disfrute pleno de los derechos humanos de las mujeres y las niñas en los últimos treinta años (1995-2025) tomando como referencia las 12 esferas de esta Plataforma, uno de los instrumentos internacionales más significativos en la agenda pública de los derechos y la justicia de género.
Primer seminario
En la primera sesión del seminario virtual Retos feministas a 30 años de la Plataforma de Beijing (1995-2025) no solo evocamos una fecha conmemorativa, sino que revisamos su vigencia, los desafíos que aún tenemos y cómo se entrelazan historias feministas de varias generaciones.
Con la instalación de Ruth López Oseira, profesora de la Universidad Nacional sede Medellín quien presentó la metodología y moderó el espacio y Adriana Benjumea Rua, directora Corporación Humanas, quien recordó los procesos con los que las delegaciones de Colombia y Latinoamérica participaron en Beijing. “No llegamos desde cero, hay un acumulado de movilización e incidencia. Ocurrió antes, durante y después”.
Diana Espinosa, de ONU Mujeres, explicó ¿qué es la Plataforma de Acción de Beijing y el compromiso de 189 Estados que la adoptaron; también hizo una línea de tiempo con un repaso de tras décadas del trabajo histórico de las feministas del mundo para la transformación de los Estados y la sociedad.
Luego, se realizó la revisión de tres ejes de acción. Olga Amparo Sánchez, de la Corporación Casa de la Mujer, recordó hitos del antes y el después de Beijing+30 como la Mesa Mujer y Conflicto Armado que elaboró diez informes y la Convención de Belém do Pará, entre otros. Mencionó como principal desafío “mantener una esperanza activa que nos convoque”.
Marina Gallego, de Ruta Pacífica de las Mujeres, manifestó que los desafíos persisten, pero destacó la necesidad de materializar el Plan de Acción de la Resolución 1325, con la agenda de Mujer, Paz y Seguridad; continuar en la búsqueda de verdad, justicia, reparación y no repetición para las víctimas de violencia sexual del conflicto armado, así como el fortalecimiento de alianzas contra la guerra y el armamentismo.
Luisa Fernanda Pineda, de la Corporación para la Vida Mujeres que Crean, valoró el avance del reconocimiento de la esfera de “los derechos de las mujeres como derechos humanos” como una de las prioridades de los gobiernos. Todavía falta asignar recursos, políticas, proyectos y programas dirigidos a las mujeres.
Segundo Seminario
En el segundo seminario virtual, se abordaron cuatro esferas de la Plataforma: la mujer y la salud, la mujer y la pobreza, la mujer y la economía, la educación y la capacitación de la mujer y la niña.
La médica Ana Cristina González, de la Mesa por la vida y la salud de las mujeres, planteó la metáfora sembrar, abonar y cosechar para comprender el proceso jurídico, legal y cultural del derecho a la salud de las mujeres. Concluyó que “el cambio más importante tras 3 décadas de la Plataforma de Beijing fue salir de la ilegalidad total del aborto a una de las regulaciones más garantistas del mundo. Las mujeres con libertad de conciencia toman decisiones sobre embarazo y maternidad”.
La experta Argelia Londoño, socióloga feminista, que trabaja en el Fondo Mujer Libre y Productiva, dedicado a promover la autonomía económica de las mujeres, presentó el desarrollo legislativo, las políticas públicas y las leyes favorables al emprendimiento femenino, así como las iniciativas con enfoque en la propiedad de la tierra y la productividad de las mujeres rurales, que fue surgiendo por incidencia del movimiento de mujeres. También se refirió a la institucionalidad del país en la equidad de género y las nuevas estrategias de emprendimiento de las mujeres en la economía popular en Colombia y nueva oferta de crédito en la banca y el comercio.
“En Beijing, recibimos un conjunto de recomendaciones para reducir la pobreza y las desigualdades de género como parte de una misma ecuación. Colombia avanza en lo legislativo, la institucionalidad de género, la inclusión financiera y el emprendimiento femenino”: Argelia Londoño.
Por su parte, la abogada Nataly Montoya, académica de EAFIT, destacó la esfera de educación con la disminución del analfabetismo y paridad en el acceso de educación básica y media. Afirmó que el mayor reto continúa siendo la inclusión educativa para las mujeres de población rural, indígenas y afro en municipios de menos recursos de inversión.
Por último, en este seminario, Verónica Coral, filósofa y docente de la Corporación Educativa Combos, destacó acciones para la esfera “niñas” a 30 años de Beijing: el fortalecimiento de la respuesta judicial y el sistema de protección, su protagonismo en espacios de decisión, las campañas con enfoque diferencial, así como el seguimiento a la inversión estatal.
Tercer Seminario
En este último seminario virtual, se abordaron las esferas de la mujer y el ejercicio del poder y la adopción de decisiones; la mujer y los medios de difusión; los mecanismos institucionales para el adelanto de la mujer; y, la mujer y el medio ambiente.
Para empezar, Beatriz Quintero, de la Red Nacional de Mujeres en Colombia, puso como contexto que “tras más de 70 años del derecho al voto femenino en Colombia, las sufragistas han estado más para elegir que para ser elegidas. La participación política de las mujeres ha mostrado avances significativos, pero aún estamos muy lejos de la paridad”.
Recordó que eliminar las brechas ha sido un trabajo constante del movimiento feminista que ha implicado poner la conversación en la sociedad y combatir el patriarcado con argumentos e incidencia. Un ejemplo es la Ley de Cuotas que se llevó siete veces al Congreso y siempre fue hundida o archivada, hasta que fue aprobada con la Ley 581 de 2000 que busca garantizar la participación efectiva de la mujer en todos los niveles decisorios del poder público.
Rocío Pineda- García señaló que promover mecanismos institucionales implica crear Ministerios de la Mujer y establecer Políticas de Igualdad, tanto a nivel nacional como en los niveles territoriales. Hoy solo quince gobernaciones cuentan con Secretaría de la Mujer por lo que esta experta enfatizó en la urgencia de asumir la equidad de género con recursos, institucionalidad y políticas.
Doris Gómez Osorio se refirió a los desafíos de un ecosistema de medios cambiante y con el entorno digital. Señaló: la concentración mediática y digital en pocas manos… masculinas y de derecha; la disputa narrativa y de sentido donde pondremos en el centro nuestras luchas.
Articular y hacer converger las agendas del movimiento ambiental y el feminismo es urgente. Gloria Zuluaga enfatizó que las mujeres son vulnerables al deterioro ambiental y a la privatización de los bienes comunes. Se necesita un análisis feminista de este problema.
Acto de reconocimiento feminista: tres décadas de acción colectiva por todos los derechos para todas las mujeres
Medellín fue la sede de un encuentro de feministas antioqueñas en un espacio de reconocimiento en el auditorio Gerardo Molina de la Universidad Nacional, sede Medellín. Esta conmemoración se realizó desde la perspectiva de una lectura local de coyuntura sobre balance de logros y desafíos, que advierte sobre el avance de tendencias políticas y sociales que representan una amenaza inminente involución para los derechos humanos de las mujeres y la justicia de género.
El 18 de septiembre, varias feministas y académicas de la región, en un encuentro intergeneracional hicieron memorias, reconocimiento y celebración del camino recorrido con voces de ayer y de hoy en el posicionamiento público de una agenda de derechos de las mujeres en su diversidad, a la luz de la Plataforma de Acción de Beijing.
Esta jornada que recordó el compromiso de los Estados para alcanzar la igualdad de género y reducir brechas en doce esferas de acción, entre las que se incluyeron derechos fundamentales a la salud, la educación, la participación, la comunicación, la economía, el medio ambiente, así como la superación de la pobreza, la violencia contra la mujer, los conflictos armados y el avance en los derechos humanos de las niñas.
En Colombia, el movimiento feminista – como lo señaló la abogada Carmen Posada en una carta que envió a este acto – ha sido diverso, plural y multicultural y ha contribuido a profundizar los conceptos de ciudadanía, igualdad y democracia. La Conferencia de Beijing fue histórica “no solo forjó la poderosa declaración de acción sino que fue un hito para el movimiento de mujeres en el mundo”.
En Colombia, este movimiento se ha expandido a varias regiones y ciudades tanto con activistas como investigadoras en el Valle del Cauca, Cauca, Bucaramanga, Barranquilla, Bogotá, Manizales y Antioquia; justamente el departamento cuenta con destacadas feministas del escenario nacional e internacional, muchas de ellas estuvieron presentes a nombre propio y de las organizaciones convocantes.
Las organizaciones convocantes fueron:
Casa de la Mujer
Cerfami
Corporación Educativa Combos
Mesa por la Salud y la Vida de las Mujeres
Corporación Humanas
Corporación para la Vida Mujeres que Crean
Corporación Vamos Mujer
Colectiva Justicia Mujer
Corporación Región
Corporación Espacios de Mujer
Mesa de Trabajo Mujer Medellín (Amiga Joven, Corporación Primavera, Penca de Sábila, la Red corregimental de Mujeres, Convivamos).
Red Nacional de Mujeres
Ruta Pacífica de las Mujeres
Tecnológico de Antioquia
Unión de Ciudadanas de Colombia
Universidad de Antioquia
Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín
Universidad de Medellín
Universidad EAFIT
Red Colombiana de derechos sexuales y reproductivos.